La cirugía endoscópica ginecológica es una disciplina moderna que reúne los avances de la endoscopia ginecológica y de la cirugía mínimamente invasiva y que permite realizar una serie de intervenciones quirúrgicas sin necesidad de ingreso. La recuperación es rápida, lo que permite a las pacientes regresar de inmediato a su actividad cotidiana.
Se emplea anestesia local, regional o bien sedación (anestesia general superficial y de corta duración) y tiene lugar en un quirófano completamente equipado, para mayor seguridad.

Ventajas de la cirugía endoscópica ginecológica
Cuando se realiza una cirugía de endoscópica la recuperación es mejor y más rápida que en la cirugía clásica, ya que las intervenciones son muy breves y el ingreso en el centro médico es de muy breve duración, de modo que la posibilidad de infecciones postoperatorias es menor que en la cirugía convencional.
Se generan, asimismo, menos gastos y puede realizarse en unidades quirúrgicas de pequeño tamaño, por lo que el coste de los procedimientos es menor que si éstos tienen lugar en hospitales o en clínicas de gran tamaño.
Cabe destacar que las técnicas quirúrgicas que se emplean son modernas y cuidadosas, y que los procedimientos anestésicos permiten una rápida recuperación y tienen muy pocos efectos secundarios.
Pero también La cirugía endoscópica ginecológica permite operar sin ingreso:
- Endometriosis.
- Tumores de ovario.
- Es el método más rápido para realizar una ligadura de trompas.
- Se utiliza muy eficazmente para el diagnóstico de ciertos casos de infertilidad.